lunes, 2 de julio de 2012

PERMISO PARA OLVIDAR

Buenos días:
Vengo a proponer que se nos permita olvidar.

Ya sabemos que un átomo de ausencia pesa más que un pelotón de soldados.
Nuestros hombros lo saben.

La carga de las estatuas compromete nuestros músculos.
Impide la fiesta que se desata cuando se piensa algo nuevo.

Buenos días:
Vengo a proponer que nos permitan digerir a los desaparecidos.
Asimilarlos en nuestro cuerpo,
Dejar de sentir su sabor atorado en la tráquea.

Si quiero ser joven, tengo que tomar distancia de esas canciones,
De esas boinas, de esas frases, de esas barbas, de esas armas, del recuerdo.

Buen día:
Vengo a olvidar como ellos olvidaron.
¿O acaso no hay que olvidar la física, la química, las mitocondrias, el derecho, el dolor, la historia y hasta tu propio nombre
Para ir con toda tu carne contra los tanques?  

Vengo a olvidar como ellos olvidaron.

Necesito soltar el mástil, la foto y el pañuelo.
Presiento que necesitaré de toda mi fuerza
Para aprender de nuevo a respirar.

(Texto escrito especialmente para el evento "Libro Vivo", en el marco de la muestra "Espejos", expuesta en el Centro Cultural Haroldo Conti - ex ESMA). 

1 comentario:

  1. Estuve pensando mucho en esto la última semana en particular y lo pienso bastante en general.
    Te banco mucho.
    Es muy poco políticamente correcto decir esto y me parece muy importante para seguir adelante, caminando.
    Agüente la ingeniería del ocio.
    Salute.
    Leo

    ResponderEliminar